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Stiven Cartagena

17 de enero de 2018

Monetizar vídeos de YouTube será más difícil que nunca a partir del próximo mes

La nueva decisión tomada por la compañía de la gran G es la respuesta a la polémica vivida entre anunciantes y YouTubers, con los primeros quejándose porque sus vídeos se muestran en contenidos violentos o de escasa calidad.

Con el nuevo cambio en la política de monetización de YouTube, Google quiere ponerle difícil la situación a los nuevos canales, exigiéndoles cierto rodaje, experiencia y visualizaciones antes de comenzar a realizar alguna monetización sobre sus vídeos. De esta manera se evitaría que los anunciantes vean su publicidad reflejada en algunos contenidos poco deseables.

Lo requisitos quedarían de la siguiente manera, esto para poder generar ingresos con vídeos de YouTube:

  • 4.000 horas de visualización en los últimos 12 meses
  • Contar con más de 1.000 suscriptores

Lo anterior serían solamente dos condiciones difíciles de cumplir para muchos de los pequeños creadores de contenido que actualmente se encuentraan monetizando sus vídeos, y cuyos canales quedarán automáticamente desmonetizados el próximo 20 de febrero.

Ganar dinero con YouTube será mucho más dificil, algo que puede terminar generando varios disgustos entre la comunidad. Sin embargo, la plataforma lo que busca es aumentar su calidad en contenido, pero es posible que muchos de los pequeños youtubers busquen otras opciones más prometedoras.

¿Tiene algo que ver Logan Paul con las nuevas medidas tomadas por YouTube?

YouTube ha comunicado a través de una publicación en su blog. «Hemos fijado estos umbrales gracias al análisis y a conversaciones con creadores como tú». «Esto nos permite mejorar nuestra habilidad para identificar a creadores que contribuyen positivamente a la comunidad, y nos ayuda a hacer que generen más ingresos por publicidad espantando a otros que no lo merecen».

Varios medios señalan que la polémica en torno al vídeo de Logan Paul ha tenido algo que ver, aunque no parece todavía probable. Casi con total seguridad Google lleva valorando estos cambios al menos desde el verano pasado, cuando estalló la guerra entre creadores y marcas.

Además, el famoso youtuber Logan Paul cumple ambos requisitos: tiene más de 1.000 suscriptores y probablemente reúne las horas de visualización necesarias, así que el endurecimiento de las reglas no puede calificarse como una respuesta de la plataforma a su vídeo de mal gusto.

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