Apple le ganó a las demás gigantes tecnológicas la batalla por el ‘favor’ de Donald Trump

La llegada a la presidencia estadounidense de Donald Trump ha coincidido con una era de grandes cambios para el orden político y económico del planeta: desde la guerra comercial con China que ha puesto en peligro el comercio global, hasta los cuestionamientos por parte de las autoridades globales al cada vez más relevante rol que tienen las empresas tecnológicas sobre la vida de los individuos.

El presidente Trump desarrolló su vida como empresario, pero son pocos los miembros de este sector quienes tienen la capacidad de influir en sus decisiones. Es por eso sorprendente que Tim Cook, CEO y uno de los más importantes ejecutivos de Apple, haya logrado escalar hasta una de las posiciones más cercanas al actual gobernante, llegando a ser incluso un amigo personal de la familia.

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Según un nuevo reportaje de The Wall Street Journal, Cook tendría una relación muy buena con la familia Trump, permitiéndole incluso reunirse con Jared Trump para explicarle cómo los nuevos aranceles impuestos a China afectarán el precio de los iPhone. Cook se habría reunido también con Ivanka en diferentes ocasiones.

Además, para pocos es desconocida la admiración que tiene el presidente norteamericano por la historia de Apple y su fundador Steve Jobs. Esta cercanía entre Cook y Trump explicaría por qué Apple gasta mucho más en lobby político que otras compañías tecnológicas.

Todo esto a pesar de que Cook tendría muchas diferencias políticas con el presidente en temas como migración, medio ambiente y relaciones exteriores. Aún así Cook manifiesta constantemente su desacuerdo con las decisiones que toma el presidente según el reporte del medio neoyorquino.

Según el Centro para la Política Responsable, el 97% de los aportes electorales de los empleados de Apple han ido al Partido Demócrata en los últimos años.