Anticonceptivo inyectable masculino llegará al mercado en 2020

Los desarrollos científicos han permitido históricamente las grandes transformaciones sociales en cuanto a la comprensión e interpretación que tenemos del mundo moderno, uno de los mayores aportes científicos viene en desarrollo desde hace cerca de siete siglos y ha derivado en invención del método anticonceptivo más usado en el mundo moderno, el condón.

Un método anticonceptivo debatido en el mundo por aquellos que no lograran separar los conceptos de sexualidad y reproducción humana, tomando partida en esta gran discusión las creencias y religión.

Pese a este desarrollo, para nadie es un secreto que los grandes esfuerzos y desarrollos de los métodos anticonceptivos se han centrado en el género femenino, cargando la responsabilidad sobre la reproducción a las mujeres, dejando consigo la deuda histórica con el género femenino y que recae en la modernidad y en el mundo científico actual.

Por ello no es raro que varios laboratorios del mundo se planteen el desarrollo de métodos anticonceptivos para el género masculino, y bajo estos parámetros, un grupo de científicos e investigadores pertenecientes al Concejo Indio Médico (ICMR) han anunciado la que sería la primera vacuna anticonceptiva para hombres y que se lanzaría para el año 2020 comercialmente en el mercado farmacéutico.

La noticia fue dada por el Hindustan Time y surge bajo un ambiente de gran expectativa en el mundo científico debido a que desde hace varios años países como Estados Unidos e Inglaterra habían anunciado el desarrollo del que sería el primer método anticonceptivo centrado en el género masculino.

Según la fuente, el grupo de científicos e investigadores del IMCR, el principal organismo de investigación biomédica en el país, habrían concluido las pruebas definitivas y ensayos clínicos para poder realizar el lanzamiento en aproximadamente en 7 meses en su versión de inyectable, y estaría tan solo a la espera de los permisos para su distribución por parte de varios organismos científicos y farmacéuticos internacionales.

«El medicamento habría sido probado en 303 pacientes con una tasa de éxito de un 97,3 % sin presencia o conocimiento de efectos secundarios y su funcionamiento constaría de una inyección bajo supervisión médica y con anestesia en la zona de los testículos, tratándose de un un inhibidor de esperma el cual posee como base un anhídrido maleico de estireno, el cual trasladaría los espermatozoides maduros hacia la uretra para mezclarse con otros líquidos del cuerpo que serían expulsados al eyacular».

Los efectos del medicamento tendrían una duración total de 13 años y necesitaría para reactivar su funcionamiento de una nueva dosis, lo cual, dejaría sin argumentos la discusión sobre el desarrollo del compuesto basado en términos económicos, generando un conflictos bioéticos, tal y como lo anuncia el doctor Anup Kumar, Jefe del Departamento de Urología y Trasplante Renal del Centro Médico: «los procedimientos no quirúrgicos siempre se prefieren porque son más seguros y además menos invasivos, es por esto que creemos que más hombres optarán por estos pronto».