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Stiven Cartagena

15 octubre, 2018

Falleció Paul Allen, cofundador de Microsoft

Paul Allen, dueño de los Seahawks de Seattle y cofundador de Microsoft, falleció este lunes en Seattle, a causa de complicaciones con un linfoma non-Hodgkin. Hace apenas unos días había anunciado que estaba siendo tratado. La enfermedad le fue diagnosticada en 1983, aunque entró en remisión.

La muerte fue confirmada a través de su cuenta de Twitter con una foto y una de sus más reconocidas frases: «Mientras trabajemos juntos, con urgencia y determinación, no hay límites a lo que podemos conseguir».

A principios de octubre, Allen informó que tenía un linfoma distinto al relacionado con la enfermedad de Hodgkin, y había asegurado que estaba dispuesto a seguir su lucha contra la enfermedad.

Aunque siempre estuvo a la sombra de su socio y amigo desde la infancia, Bill Gates, Allen era un fanático de la informática y tuvo un gran papel en la creación de lo que hoy conocemos como Microsoft.

Allen comenzó sus estudios en la escuela de Lakeside, donde también conoció a Bill Gates, quien a pesar de ser tres años más joven compartían un mismo sentimiento por el mundo de la tecnología.

Juntos fundaron Microsoft en 1975, y Allen tuvo la iniciativa de adquirir un sistema operativo llamado QDOS por 50.000 dólares.

Para el año 1983, el empresario renunció a la empresa cuando se le diagnosticó la enfermedad de Hodgkin, un cáncer que da en el sistema linfático.

Allen retomó su lugar en Microsoft en 1999, aunque un año más tarde lo abandonó definitivamente. Con el dinero recaudado gracias a sus labores en la empresa, Allen creó juntoa su hermana el conglomerado Vulcan Inc, con sede en Seattle, que se encargaría de gestionar sus inversiones privadas y tareas filantrópicas.

Como todo buen millonario, destinaba una parte de su fortuna a las donaciones, tanto así que en el 2003 donó 5 millones de dólares para establecer el centro de artes visuales Faye G. Allen, en honor a su madre. Allen también colaboraba con la Escuela de Medicina de la Universidad de Washington, a la que donó 3,2 millones de dólares.

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