¿La peor compra de Musk? Twitter ahora solo vale $15 mil millones de dólares
En medio de sus polémicas decisiones y una manera de liderar bastante cuestionada, desde que el multimillonario compró Twitter su valor ha caído significativamente.
El año pasado, el mundo se sorprendió cuando Elon Musk, uno de los hombres más ricos del planeta, anunció su intención de comprar Twitter por $44 mil millones de dólares. Aunque el costo de por sí fue bastante elevado y el magnate intentó renunciar a la compra semanas más tarde, los inversores de la compañía anunciaron una demanda que terminó obligándolo a cumplir su palabra.
Muchos se preguntaron qué motivó al fundador de Tesla y SpaceX a adquirir una plataforma de redes sociales que llevaba años perdiendo usuarios y dinero, pero Elon Musk fue claro al comentar que su idea no era hacerse millonario con la red social sino más bien crear una plataforma mucho más útil para todos los usuarios de internet.
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La adquisición se completó en octubre de 2022 y en pocos meses la compañía al parecer ha perdido gran parte de su valor. Según un informe de Fidelity, una de las firmas de inversión que ayudó a financiar la operación, Twitter ahora vale solo un tercio de lo que Musk pagó por ella. Es decir, unos $15 mil millones de dólares.
Pero, conociendo el éxito de Musk en los negocios, la primera pregunta que viene a la mente es ¿qué ha salido mal en este caso? Para empezar, Musk se enfrentó a una fuerte oposición tanto dentro como fuera de Twitter. Varios ejecutivos clave, incluido el CEO Parag Agrawal, fueron despedidos el mismo día que Musk tomó el control. Otros empleados y ejecutivos renunciaron o fueron despedidos en los meses siguientes, lo que provocó una fuga de talento y una pérdida de confianza en el liderazgo del magnate, que no termina de agradar en gran parte de la sociedad.
Además, Musk chocó con las políticas de moderación de Twitter, que consideraba demasiado restrictivas y sesgadas. El multimillonario se declaró un «absolutista de la libertad de expresión» y dijo que revertiría las prohibiciones permanentes a usuarios suspendidos, incluido el expresidente Donald Trump, que fue expulsado de la plataforma tras el asalto al Capitolio en enero de 2021. Esta decisión generó una gran controversia y críticas por parte de quienes acusaban a Musk de fomentar el odio, el acoso y la desinformación en la plataforma.
A pesar de que Elon Musk también tomó acción para cambiar el modelo de negocio principal de Twitter, que dependía en gran medida de los ingresos publicitarios. El empresario lanzó el servicio de suscripción Twitter Blue a nivel global, incorporando unciones premium a los usuarios dispuestos a pagar una cuota mensual.
Sin embargo, Twitter Blue todavía no tiene el éxito esperado y no logra compensar los ingresos tras la perdida de los anunciantes que se alejaron de Twitter por temor a asociar sus marcas con contenidos polémicos impulsados principalmente por el propio Musk. Según algunos datos, menos del 1 por ciento de los usuarios activos mensuales de Twitter está suscrito a Twitter Blue.
El magnate ha sido claro en que también quiere brindar ingresos a quienes crean contenido en Twitter, por lo que lanzó las suscripciones, un servicio que permite a los creadores establecer una tarifa para que los suscriptores puedan acceder a publicaciones exclusivas. Este sin duda es un movimiento bien encaminado, pues la creciente economía de los creadores promete un gran futuro, incluso en América Latina han surgido compañías como BrandLovrs, que recientemente recaudó $2 millones de dólares de capital semilla para escalar su modelo que busca impulsar la economía de los creadores.
Aunque no se puede negar que Musk ha tomado algunas buenas decisiones, especialmente en el modelo económico de la plataforma, por el momento la compra de Twitter por parte de Elon Musk parece haber sido un fracaso tanto financiero como estratégico. Lejos de revitalizar la plataforma y convertirla en un espacio más abierto y diverso, Musk ha provocado una crisis interna y externa que ha dañado su reputación y la de Twitter.
Pero no todo está perdido para Elon y los usuarios fanáticos de Twitter, pues en pocos días Linda Yaccarino tomará su rol como nueva CEO de la compañía, lo que podría traer un nuevo aire a la compañía pues, en cierto modo, la mayoría de los detractores de Twitter están en contra del liderazgo de Musk y no precisamente de la plataforma como tal.
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