Curvilux: El futuro de la tecnología en nuestros dormitorios

IoT, de Latam para el mundo: el futuro de la tecnología en nuestros dormitorios

Con cargadores inalámbricos y luces LED que se ajustan automáticamente al ambiente, Curvilux, la mesa de noche inteligente nacida en Argentina lanza hoy en Indiegogo.

Las horas de sueño parecen nunca ser suficientes en éstas épocas. Y si un día tienes suerte y puedes irte a dormir a un horario razonable, te diste cuenta que olvidaste apagar la luz o poner el celular a cargar.

Estos problemas y una discusión por un lío de cables y cargadores enredados entre dos jóvenes hermanos de Argentina, fueron el origen de Curvilux, la mesa de noche inteligente que lanza hoy su campaña de crowdfunding en la plataforma Indiegogo.

Curvilux te permite bloquear tu cajón, poner tu alarma simulando el amanecer y escuchar tu música favorita solo con touch en tu smartphone. Incluye luces LED que reemplazan las lámparas e iluminan el suelo cuando te despiertas en la noche, conectividad Bluetooth y NFC (Near Field Communication), un sistema de audio con parlantes y cargadores USB e inalámbricos para que puedas cargar hasta 3 dispositivos a la vez. Curvilux promete además una actualización temprana del app que analizará tus ciclos de sueños y podrán predecir el mejor momento para ir a dormir.

Los Morelli aprendieron a las malas que cuando se trata de campañas de crowdfunding no hay tal cosa como suerte de principiante. Hace aproximadamente 2 años lanzaron sin éxito un primer prototipo en otra plataforma, lo que tuvo como resultados más lecciones aprendidas que backers.

La determinación implacable y la habilidad de utilizar el fracaso como un trampolín son parte del ADN de un verdadero emprendedor. Sumado a un equipo de cinco, que combinan conocimiento y experiencia en ingeniería mecánica y de sistemas, diseño industrial, desarrollo de software, satélites y radares, Curvilux se embarcó en un proceso de rediseño e iteración que duró un año.

Gracias al apoyo y consejo de algunos emprendedores conocidos de la región, como Andrés Barreto (cofundador de Grooveshark y Onswipe), quienes han transitado antes este camino, nació un nuevo prototipo, con nuevo diseño y funcionalidades, y los Morelli viajaron de Carlos Paz, Córdoba a Nueva York para empezar a preparar la nueva campaña. No sabían que en el pequeño Airbnb donde se alojaron el destino los iba a cruzar con quien es hoy su director de producto y quinto cofundador, el colombiano Andres Santanilla. Pablo Morales y Patricio Aguirre, los miembros restantes del equipo, trabajan desde Argentina y están dedicados al desarrollo del app y del sistema electrónico.

Curvilux, una startup nacida en una economía emergente de la ambición y el talento de dos hermanos que crecieron desarmando sus juguetes para arreglar y volver a ensamblar, quiere convertirse en un jugador clave en la revolución de los muebles inteligentes, una industria que no ha innovado mucho en tiempos recientes. “Si te ponés a pensar un minuto te vas a dar cuenta que los muebles están en todos lados a donde vamos y son básicamente el alma de nuestras casas. Sillas, mesas, escritorios y camas, por no mencionar todos los objetos que decoran los ambientes. Con Curvilux estamos haciendo de los muebles algo realmente personal y un objeto activo que se comunica con los dispositivos inteligentes del hogar y te ayudan en tu día a día”, dice Rodrigo.

Según un estudio del fondo SparkLabs, ‘Connected homes’ es uno de los campos de batalla dentro del Internet de las Cosas (IoT) y la innovación en hardware para el consumidor final, junto a los wearables y los drones. Por lo tanto, habrá que estar pendiente en los próximos años de la carrera entre las grandes corporaciones como Google o Samsung por un lado (que adquirieron Nest Labs y SmartThings respectivamente), y las startups por otro, en este rápido y creciente interés de los consumidores por productos IoT.  

Aunque actualmente sólo el 4% de los consumidores poseen un dispositivo inteligente para la casa, cerca de dos tercios de ellos planean comprar uno en los siguientes cinco años. El desafío para ambas partes es el mismo: integrar la tecnología de forma útil y significativa en nuestras vidas.

Curvilux fue pensada para estar lista para usar en cuanto la retiras de la caja. Tiene un diseño muy moderno y simplista pero “es el mueble elegante, duradero y asequible que te mereces, y el más fácil que jamás hayas tenido que armar”, dice Juan, quien pasó casi un año en Australia trabajando en una fábrica de muebles después del primer lanzamiento para pulir sus habilidades en diseño industrial.

Tendremos que esperar algunos meses antes de poder despertar con el sonido de una cascada, evitar tropiezos en medio de la noche o encontrar el teléfono 100% cargado y listo para empezar el día, pero a partir de hoy puedes ordenar anticipadamente y al menor precio posible.

Lo mejor de Curvilux es que se adapta a tus hábitos diarios. La pregunta es si será capaz de adaptarse en el tiempo, dentro de este actual sprint de los objetos inteligentes que estamos presenciando.

Por: Victoria O’Shee, emprendedora y business strategist en Publicize.