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Stiven Cartagena

23 de julio de 2018

Biblioteca Nacional de España está guardando memes debido a su valor documental

Normalmente los memes son utilizados como un recurso humorístico en el mundo del Internet, por lo que su función informativa puede pasar desapercibida para la gran mayoría de internautas que consumen esta clase de contenido.

Pero de hecho, es fácil recordar uno que otro visto en las redes sociales, o bien sea que un amigo lo compartió directamente a través de chat. Los temas que se ven en los memes pueden variar desde situaciones cotidianas hasta el panorama político, y precisamente por esta razón la Biblioteca Nacional Española considera a los memes una fuente relevante de la «imagen de la sociedad, la historia y la cultura» de la actualidad.

De esta manera, la institución se ha mantenido a lo largo de la historia de España almacenando todo tipo de documento y en cualquier soporte que reflejara la cultura y visión de este publico, desde periódicos, panfletos, tiras cómicas, etc.

En un informe publicado en eldiario.es, la labor de la biblioteca es «preservar el patrimonio documental» de Internet en España nació en 2009 de la mano de Mar Pérez Morillo y según la tarea se fue haciendo cada vez más grande, el proyecto terminó siendo parte del Consorcio Internacional para la Preservación de Internet.

Todo esto consiste en recopilar de manera masiva los dominios .es y combinar esta lista con otra colección más selectiva según la relevancia del tema, como la música o el cine, e incluso sucesos importantes de España como los atentados de Cataluña.

La Biblioteca Nacional contrató a Internet Archive en primera instancia para realizar la recolección de todo el material, pero gracias a un convenio con Red.es ahora cuentan con su propio programa NetarchiveSuite.

Uno de los principales motivos para guardar el contenido son las situaciones efímeras y lo que esto implica. Plataformas que por ser privadas están en constante cambio, o contenido que es censurado, muchas veces no dan tiempo a guardarlo y es borrado sin aviso alguno.

Parte del éxito de esta nueva etapa de la Biblioteca se da también por compartir el archivo en sus cuentas de Facebook y Twitter, donde ya tienen cientos de seguidores.

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